La emigración de la población gallega durante la posguerra fue muy elevada, como elevado fue también el retorno de las personas emigradas, especialmente durante la transición. Para ellas, no solo fue difícil la salida del país, sino también el regreso a un lugar en aparente democracia, pero aún en conflicto por las heridas no reparadas de la contienda. A través de la lectura de ensayos y novelas centrados en el retorno, se pretende invitar a una reflexión sobre las consecuencias del regreso al lugar de origen y analizar su repercusión en los ámbitos familiar, social y político, entre otros. Hablamos de ruptura de identidad, de inadaptación crónica, de choque generacional, de decepción, de desengaño o desarraigo, situaciones todas ellas que evidencian los conflictos de una identidad en permanente (de)construcción.